jueves, 2 de diciembre de 2010

Capitulo XII. LAS POLEMICAS DEL AÑO 72.






Capitulo XII
LAS POLEMICAS DEL AÑO 72.

            Diferencias en el seno del Consejo Directivo entre las distintas corrientes que integran la dirección de la uf, y que venían del conflicto de marzo, originan que los integrantes de la lista 9, convocaran a una asamblea de dicha lista el viernes 21 de julio “frente a las distintas situaciones que se han producido en el Consejo Directivo”. Según la convocatoria se analizaría los “procedimientos aplicados por la mayoría (listas 1 y 3). Resolución por la cual se prohíbe a los dirigentes de la lista 9, su participación en las gestiones para tratar los temas del gremio”.[1]
            Posteriormente esa agrupación emite un boletín titulado los integrantes de la lista 9 se dirigen al Gremio Ferroviario. En el explicitan sus diferencias con el resto del Consejo Directivo de la Unión Ferroviaria. “Desde el día que ocupamos nuestros puestos de lucha en el seno del Consejo Directivo -hace 17 meses - mantuvimos siempre una posición de UNIDAD, tratando por todos los medios de superar, en las discusiones del Consejo los diferentes enfoques sobre cómo conducir la lucha en beneficio de las conquistas y la UNIDAD de todo el gremio ferroviario. Hemos evitado salir públicamente, a pesar de las agudas discusiones por entender que este recurso debe utilizarse luego de agotada toda otra alternativa.
Y nos hemos mantenido fieles a esta posición, a pesar de que la Lista 1 y luego bajo las siglas “ROE” (Resistencia Obrero Estudiantil) y “Dignidad Obrera” ha salido públicamente al gremio.
Pero en estos últimos meses, y fundamentalmente los acontecimientos más recientes, hacen imposible mantener nuestro silencio y por esta causa hemos decidido editar este boletín, para que el gremio tenga bien claro nuestro pensamiento y juzgue nuestra actitud.
Lo que ha determinado nuestra decisión de salir públicamente, es la orientación que en forma aventurera e irresponsable, le están imprimiendo a nuestro sindicato la ROE (Resistencia Obrero Estudiantil - “Dignidad Obrera”, etc.). con el apoyo de los integrantes de las listas l y 3.
Nuestro gremio está viviendo una doble y dramática situación: por un lado nuestros míseros sueldos, a lo que se agrega él atraso en los pagos; y por el otro la precipitación del ferrocarril en un abismo que amenaza su paralización.
Esta amarga realidad nos obliga a determinar con qué orientación y qué enfoque le damos a nuestra lucha.
En nuestra opinión, no se trata de aplicar sólo algunas medidas de tipo “sensacionalista” o que conduzcan a una mayor paralización del ferrocarril; sino que se trata de profundizar la movilización, buscando crear un gran estado de opinión pública, en todo el país, promoviendo el tema en todos los sectores políticos. Redoblar la publicidad sobre nuestra dramática situación, hacer todas aquellas medidas que posibiliten movilizar al gremio en la calle, no sólo en Montevideo sino también en los centros ferroviarios del Interior del país.
Pero, todo esto debemos hacerlo evitando que seamos nosotros los que paralicemos el ya prácticamente paralizado Ente ferroviario que lo está por culpa de los gobiernos que han aplicado - y siguen haciéndolo - las recetas del Fondo Monetario Internacional.
Asimismo, en relación a la conquista de un justo Presupuesto y el  postulado de $ 40.000 de sueldo mínimo, debemos de participar con mayor intensidad junto a los de más gremios de la Mesa Sindical Coordinadora, única garantía de posibilitar el éxito. Quebrar la política salarial del gobierno es tarea de todos los trabajadores.
En esa lucha está la CNT y la ‘Mesa Sindical Coordinadora.
HECHOS RECIENTES
Pero esto requiere que la dirección sindical actúe sin sectarismos y buscando siempre la unidad, lo que, lamentablemente, no está sucediendo:
Una clara demostración de ello se dio en la asamblea llevada a cabo el día lunes 17 de abril (la mas grande que hemos realizado en mucho tiempo), cuando en medio de las deliberaciones la “ROE”- que es una agrupación política - procedió a repartir un boletín donde no sólo opinaba sobre los temas que se debatían e importaban al gremio sino que se permitió el tupé de formular una moción concreta, la que luego fue fundamentada por integrantes de las listas l y 3.
Esto no puede ser tolerado.
Todos los ferroviarios podían hablar, presentar mociones; pero estaba fuera de lugar que una organización que se autodenomina “Resistencia Obrera Estudiantil”, pretenda arrogarse el derecho de opinar y mocionar a través de un boletín que pomposamente llaman ‘Dignidad Obrera”.
En dicha asamblea los compañeros de la Lista 9, sostuvimos posición de mantener todas las medidas, tal como estaban, y reclamar una urgente entrevista con el Directorio y el Ministro de Transporte, para discutir en primer término la libertad de los compañeras detenidos y la eliminación de las sanciones y reposición a sus puestos de los compañeros involucrados, y reclamar además, el programa de pagos para el Interior, que hasta ese momento no estaba definido.
 La posición de la ROE acompañada por los integrantes de las listas 1 y 3, era dar un plazo hasta la hora 9 del martes 18 de abril, manteniendo todas las otras medidas, pero si a esa hora no había soluciones totales, a la hora 10 ocupar los lugares de trabajo y suspender la corrida de todos los servicios, lo que implicaba de hecho comenzar la huelga.
Esta posición significaba, que aunque se lograra el dinero y el programa de pagos, los compañeros del interior quedaban sin poder cobrar porque se cortaban todos los servicios y los dejábamos aislados.
A eso nos opusimos con toda energía y la asamblea se pronunció categóricamente, votando por amplísima mayoría la moción presentada y defendida por los integrantes de la Lista 9. La moción de la ROE y los integrantes de las listas 1 y 3 fue derrotada estrepitosamente.
Pero aquí queremos señalar un hecho que demuestra porque es aventurera e irresponsable la orientación que siguen quienes se proclaman “mayoría”.
Luego de la asamblea del lunes 17, se concurrió al Directorio para comunicarle la resolución de que, mientras no fuesen liberados los compañeros presos; mientras se mantuvieran sanciones y suspensiones; y sin un plan inmediato de pagos al Interior, no se levantaría ninguna medida.
A las 8 de la noche el Directorio contesta que no había detenidos en todo el país; que no habría sanciones; y concreta un plan de pagos para el Interior, lo que significó un triunfo de la firmeza del gremio.
Estaba claro y ese era el sentido de la resolución que tomó la asamblea, que de concretarse esos puntos se levantaban las medidas y se pasaban a realizar las acciones que el movimiento obrero tenía dispuestas para el día 18 (martes).
Pero, a pesar de que todo esto era muy claro, el Consejo Directivo estuvo reunido CINCO HORAS!!, para resolver levantar las medidas, pero con la condición de que si no se pagaban  los 6.000, se aplicarían la mismas medidas, o sea: cortar las cuentas de gobierno; no correr trenes de carga y hacienda; los paros de brazos caídos; y la media hora de paro cada 4 de trabajo a partir del día lunes 24 de abril.
Fue necesario realizar una nueva asamblea el viernes 21 de abril, donde nuevamente, por una amplia mayoría, fue derrotada la posición de la ROE y los integrantes de las listas 1 y  3, y aprobó la posición presentada por los integrantes de la Lista 9.
Dicha asamblea resolvió adoptar las medidas de lucha que el gremio conoce, pero excluyendo expresamente la no cortada de las cuentas de gobierno, por entender que esta es una medida que podía traer derivaciones de otro tipo y que no correspondía aplicarla por el reclamo de los $ 6.000. Sin embargo el martes 25, la mayoría del Consejo haciendo caso omiso a lo resuelto por la asamblea, resolvió incluir también esa medida a lo largo del gremio.
Y todo esto ha culminado el día viernes 28, donde se levantan las medidas con el compromiso del pago de $ 4.500 en lugar de los $ 6.000.
NUESTRA POSICION SOBRE EL AUMENTO DE LAS TARIFAS DE A.F.E.
Los Integrantes de la Lista 9 en 1a sesión del Consejo Directivo del martes 25 de abril, fecha que se adoptó posición sobre este punto, mantuvimos la tesitura de que efectivamente debíamos oponernos al aumento de los pasajes, tomando en consideración el pésimo servicio que viene prestando el organismo y que este aumento no iba a redundar en un mejoramiento de los mismos. Pero en relación al aumento en las cargas y la hacienda, expresamos nuestra posición, de que no estábamos dispuestos a hacer jugar al gremio en medidas, para que no se le aumenten las tarifas a la Fabrica de Pórtland, a los grandes latifundistas que han duplicado el precio del ganado, así como a las arroceras CIPA, etc.  -
No es nuestra misión luchar para defender los intereses de los que forman la rosca de la oligarquía. Que debe hacerse un estudio posterior del conjunto de las tarifas de cargas con la participación de la Comisión Asesora, estamos de acuerdo, pero eso no puede implicar qué a través de medidas gremiales, impidamos que no se pongan en practica los aumentos ya fijados para las cargas y la hacienda, máxime cuando se está en plena zafra y los grandes intereses económicos están en juego.
SOBRE LA CRISIS DEL FERROCARRIL
Del conjunto del deterioro del ferrocarril, se destaca la falta de material tractivo.
¿Por qué pasa esto?
l) Todos conocen la falta de repuestos, tanto de locomotoras ALCO y ALSTHOM
2) La aguda falta de personal.
En un momento que por el propio desgaste de las locomotoras, que las G.E. tienen sus 20 años, se necesitaba por lógica más repuestos y más personal, tanto para el mantenimiento como para la reparación, sucede a la inversa, ahora el Taller Diesel trabaja con el 40%, del personal que tenía en años anteriores. Y un caso similar sucede en las Remesas y también sin contar con repuestos; muchas veces deben desarmar una locomotora para terminar otra.
Esto indica claramente, que para una recuperación del material tractivo, lo primero es la toma de personal obrero de acuerdo al mecanismo que marca la C. Orgánica dando preferencia a estos lugares, y acompañas esto con la traída inmediata de repuestos y el reequipamiento de los talleres y las remesas, con las herramientas imprescindibles. Sin, este, no es posible hablar en serio recuperar locomotoras,
No nos, oponemos a que se clarifique el proceder de los jerarcas, con documentación seria y veraz, pero no estamos de acuerdo en pretender diluir una responsabilidad qué está expresada en la .política general que han desarrollado los distintos gobiernos en materia ferroviaria, y que nos han dado como resultado este cuadro de un ferrocarril paralizado.
Recordemos que el ex ministro Queraltó trató de buscar la crisis de AFE en defectos internos y administrativos, para rehuir su responsabilidad de encarar las soluciones que correspondían a nivel del gobierno.
Esto significa, que la recuperación del ferrocarril no la lograremos a través de medidas con “sentido espectacular”, sino que esto lo obtendremos por medio de la acción permanente, que involucre no solo a todo el gremio sino también a la población a lo largo de todo el país.
El TEMA DE LA AFILIACION A LA CNT
También deseamos informar sobre este punto.
En la reunión del Consejo Directivo del día martes 18 de abril, de improviso se trajo a discusión la afiliación a la CNT en forma inmediata.
Nosotros, no de ahora sino desde que se creó la CNT venimos bregando para que nos afiliemos a la gran central obrera; esa central que se ha fortalecido en luchas contra este régimen.
Su orientación ha sido puesta a toda prueba en todo este período y en esté momento es esa CNT la que encabeza la lucha contra la estafa salarial, contra la represión y el fascismo; y por auténticas soluciones patrióticas para el pueblo.
No obstante, afirmamos que la afiliación a la CNT implica un pronunciamiento sobre el programa y sobre la orientación general que se ha trazado en sus congresos.
Que debemos afiliarnos, sí;’ pero que este tema debe ser puesto previamente a discusión de todo el gremio y resuelto en definitiva en la próxima Asamblea General de Delegados, la que debe convocarse de inmediato.
En definitiva nuestra posición es bien sencilla y clara. afiliarnos con un propósito unitario y que esa decisión sea el producto de la discusión y resolución de todo el gremio, y no un resolución amañada y torcida de un grupo de dirigentes.
Mientras tanto, nada nos impide seguir como hasta ahora - y siempre hemos sido invitados a participar con derecho a opinar en los plenarios que realiza 1a CNT . Tal es así, que en el Plenario que se realizó el martes 4 de abril y que resolvió el paro general del 13 y las jornadas del 18 y 25 de abril, con la presencia de 109 organizaciones sindicales, el miembro del Consejo Directivo de la Lista 1, señor Raúl Olivera (que fué el único designado o encargado por el presidente para representar a U Ferroviaria en dicho evento),se tomó la atrevida facultad de hacer proposiciones y acompañar posiciones qué no habían sido consideradas ni siquiera por el Consejo Directivo, y que significaban nada menos que realizar la famosa “escalada” de paros de 24 horas, 48, 72 y HUELGA GENERAL.
Pero además, llama poderosamente la atención lo siguiente:
1°) Que los integrante de la ROE, “Dignidad Obrera”,..etc., qué en todas sus publicaciones no desaprovechan oportunidad para criticar a la CNT y su orientación; sean ahora los más apurados para afiliarse  sin esperar la realización de la Asamblea General de Delegados.
2°) Que los integrantes de la Lista 3, que se pronunciaron siempre contra la afiliación a la CN ahora - sin esperar la instancia de la consulta al gremio votan por afiliarse.
¿Desde cuándo les entró el apuro . y por qué?
Esto será motivo de un próximo boletín.
Pero queremos señalar que la asamblea realizada el viernes 21 de abril respaldó en forma unánime nuestra posición, mientras que no tuvo un sólo voto, la posici6n adoptada por la mayoría del Consejo Directivo.
Y el gremio se preguntará: ¿qué hizo entonces la mayoría del Consejo frente a ese pronunciamiento? Es de asombrarse, pero es así. En la reunión del Consejo del martes25 de abril, los integrantes de la mayoría reafirmaron que ellos continúan adelante con su decisión, porque la posición adoptada por la asamblea del viernes 21 no tiene ningún valor. ¿Qué les parece compañeros ferroviarios? Según el criterio de estos compañeros, las asambleas sólo tienen valor cuando éstas, avalan sus posiciones. ¡Linda manera de concebir la democracia sindical!
- Por último deseamos establecer que no puede continuar funcionando en el local de nuestra organización sindical, la “Resistencia Obrero Estudiantil”.
No es un sindicato, ni un centro estudiantil.
No es un organismo gremial.
Es un movimiento POLITICO.
Por lo tanto, es totalmente improcedente e incorrecto, que funcione en el local de Unión Ferroviaria.-
A LOS COMPAÑEROS DEL INTERIOR
Queremos informarles que si no participamos en las giras al Interior, es porque en forma deliberada se nos excluye de las delegaciones.
Por ahora hemos preferido no salir como Lista 9, pero de persistir esta situación anormal, nos veremos en la necesidad de hacerlo.
PEDRO E. TOLEDO, FRANCISCO  MAIORANA. CARLOS A. IRIGOYEN, RAUL;
A. BOTTA ROGER LEDESMA. RAUL FERNANDEZ, LAVALLEJA PERALTA y HECTOR W. MENDEZ.”
            El 12 de mayo la Unión Ferroviaria, emite oficialmente una aclaración al gremio, firmada por su Consejo Directivo. Allí se contestan los ataques y cuestionamiento que habían realizado los integrantes de la lista 9.
la minoría del. C. Directivo de “Unión Ferroviaria” pretende alertar al Gremio sobre presuntas irregularidades cometidas por la mayoría del Sindicato y a la vez sobre la ‘irresponsabilidad” o “aventurerismo” con que ésta ha encarado la lucha gremial”. Previo a que se formularan las explicaciones “que nuestros afiliados se merecen, máxime cuando se formulan cargos tan graves mediante una comunicación tan insólita como desusada en los anales de nuestras pujas internas”, la mayoría de la dirección recuerda al gremio que las elecciones últimas el gremio dio una mayoría incuestionable a la Lista 1. “Si no nos apartamos del tradicional estilo democrático que profesamos para resolver nuestras cosas, nadie puede tener dudas que existe una mayoría respaldada por la voluntad de un gremio a la cual le corresponde históricamente regir los destinos de los trabajadores ferroviarios. Por ello, cuan do se elabora una estrategia, se planifican las tácticas a seguir o sé emplea un método determinado de Lucha, la responsabilidad será siempre de tas mayorías, pues el gremio juzgará al final los triunfos o las derrotas para seguir apoyando una línea o para rechazarla y sustituirla si así lo cree conveniente. De ahí surge entonces que habiendo corrientes opuestas en su forma de encarar la Lucha Gremial, lo que sale publicado en nuestros boletines sobre planes concretos de trabajo sindical, con el apoyo total o parcial de los dirigentes, debe ser aceptado por quienes no están de acuerdo, porque es la expresión de una auténtica DEMOCRACIA SINDICAL que se ejercitará hasta tanto el gremio no diga lo contrario a través del voto o Asambleas Generales de Delegados. Por lo tanto estas aclaraciones tienen el total respaldo de las listas 1 y 3 cuyos integrantes han sido cuestionados por los compañeros de la lista 9”.
            Los integrantes de las lista 1 y 3, se dedican a renglón seguido a determinar  sus opiniones sobre las críticas que se pueden y deben formular en los debates entre trabajadores que piensan distinto “Nadie puede negar qué la critica sana, que construye; que se formula con sobriedad, con ética, contribuye a clarificar el camino de los trabajadores y fortalece la UNIDAD del Gremio.(...) En cambio si los termino son despectivos tratando de enlodar a compañeros calificándolos de “aventureros” o “irresponsables” porque, no concuerdan con determinadas posiciones, se está cayendo muy bajo, (...) se está en definitiva DIVIDIENDO AL GREMIO”.
            Posteriormente dan respuestas a las acusaciones que se le habían formulado: “1) Acerca de orientación aventurera e irresponsable y aplicación de medidas de tipo sensacionalista. Lo de aventureros e irresponsables al parecer responde a una apreciación muy subjetiva y es evidente que está relacionada con los métodos de lucha que hemos impulsado en especial para definir la angustiosa situación del Ferrocarril. Y los fundamentos del cómo y porqué se aplican, según le fines perseguidos, han sido explicados en anteriores boletines. Solo bastaría con responder al Gremio que ya se vislumbran los frutos de esas medidas de tipo sensacionalista que desarrollamos, como lo fueron LA OCUPACION DE TALLERES, LAS CORRIDAS DE TRENES BAJO CONTROL OBRERO EL NO TRANSPORTE DE CUENTAS GOBIERNOS, etc. Todo eso tuvo un fin, y ese fin —lo dijimos siempre— fue concitar la atención nacional sobre el Ferrocarril y presionar para que se hallaran soluciones urgentes. Y a esta altura si bien no podemos ser integralmente optimistas, en cambio debemos reconocer que el Gobierno ha definido tres cosas importantes. No permitirá que se cierre afe; ordenó la inversión de 1 millón 400 mil dólares para que no se paralice y encomendó a una Comisión de Técnicos el estudio de las primeras medidas de fondo hacia la recuperación teniendo 60 días para producir el informe final.Entonces cabe preguntarse estos primeros pasos que se están dando son obra de la “Generosidad” de los Gobernantes o son el fruto de una lucha gremial de muchos años y que ha sido rubricado en los últimos tiempos con medidas “sensacionalistas” y “aventureras” que supieron acaparar la atención nacional sobre nosotros? Hubiéramos obtenido igual resultado confiando únicamente en denuncias parlamentarias y sin participación activa de la población en nuestro favor, (...) El Gremio sacará sus conclusiones y estarnos seguros que cada día que pasé habrá mas aventureros e irresponsables que codo a codo con nosotros estarán luchando por nuestra salvación”.
            Sobre los cuestionamientos acerca de la política dentro del sindicato, el Consejo Directivo dice que “Resulta verdaderamente gracioso” que la lista 9 que responde al Partido Comunista denuncie que dentro del Sindicato funcione  una Agrupación Política integrada las listas 1 y 3. “Primeramente corresponde desvirtuar que la Resistencia Obrero-Estudiantil sea una Agrupación Política, porque sencillamente no responde a ningún partido político determinado ya que es un agrupamiento de masas que actúa a nivel de masas y cuyo fin es coordinar en el movimiento obrero todas las luchas que emprenden los trabajadores para liberarse de la explotación que como clase social sufren. Se hace política sí, pero política de clase, donde se defiende únicamente los intereses de los proletarios aunque sin responder a ningún partido político determinado, ni se actúa en función de intereses políticos, a pesar de que sus componentes puedan tener las más diversas opiniones ideológicas. Es un instrumento exclusivo de los trabajadores que como nosotros luchan contra los enemigos de clase y también contra quienes con sus vacilaciones se las ingenian para coexistir con ellos”.
            Acerca de las Asambleas informativas o consultivas, la mayoría opina que: “Este tema de las Asambleas abiertas que se realizan cuando se moviliza al Gremio debe ser bien aclarado pues cuando se pretende decir que la mayoría del Sindicato no acata las decisiones de la masa, se está falseando la verdad. Las únicas Asambleas que estatutariamente tienen poder resolutivo e imperativo para el Consejo Directivo son las Asambleas Generales de Delegados. En los últimos tiempos debido a las conocidas dificultades económicas que padecemos desde que dejaron de descontar la Cuota Sindical en el boleto de pago, al no poderse convocar la Asamblea General pues su costo es MILLONARIO, se han puesto en práctica varios mecanismos de consulta a las bases para no perder contacto con ellos, pero las resoluciones finales obligatoriamente las toma el Consejo Directivo. Son mecanismos que no. están previstos en los Estatutos y por lo tanto no tienen un poder resolutivo similar al de una Asamblea General de Delegados donde está representado todo el País, mientras que en los otros solo opinan un grupo valioso sí, pero que representa una parte de los afiliados en especial de la Zona Local. Siempre se ha tratado de escuchar lo que aconsejan estas Asambleas consultivas o informativas, pero hemos dicho anteriormente que no debe abusarse de su alcance, pretendiendo darles un papel imperativo que sustituya al órgano máximo que es la Asamblea General de Delegados. Muchas: veces el Consejo  Directivo  ha homologado tácitamente lo que dicen estas Asambleas relámpago pero otras veces, asumiendo toda la responsabilidad de conducir al Gremio por el mejor camino, ha dictado medidas que pueden estar en contradicción con lo hablado en la Asamblea. Concretamente la Asamblea consultiva que se dice la mayoría del Sindicato violó su resolución, (aunque no era resolutiva) fue lo realizado el día 21 de Abril donde 30 Compañeros pedían que no se aplicara una medida de terminada, y sin embargo el Consejo Directivo, su mayoría, desecho tal proposición dado el número reducido de Asambleístas mocionantes teniendo en cuenta que el gremio tiene más de 8.000 funcionarios. Si embargo los compañeros de la Lista 9 salen al Gremio avalando la posición de los 30 compañeros asambleístas porque era a su vez la posición de la minoría del Consejo Directivo. Nótese que si esto no se aclara debidamente el Gremio entero, en especial los compañeros del Interior, pueden pensar que se actúa arbitrariamente a espaldas de maestros afiliados. Queda claro entonces que las Asambleas abiertas o informativas o consultivas, son para auscultar la opinión de la masa y en lo posible se trata de contemplar sus puntos de vista, pero no tienen valor imperativo corno para cambiar fundamentalmente los lineamientos que se traza la Dirección Sindical.
            Sobre la decisión de la mayoría de afiliar al gremio ferroviario a la cnt, “Los términos que se emplean para criticar nuestra decisión de afiliarnos a la cnt son lastimosamente tendenciosos. En primer lugar se insiste en darle valor resolutivo a una asamblea consultiva. Segundo que 1o que han planteado las listas 1 y 3 es que teniendo en cuenta los graves momentos que atraviesa la clase obrera Uruguaya, es necesario que aparte de fortalecer la unidad, los ferroviarios dejemos de ser un gremio fraternal y tengamos lo oportunidad de opinar y decidir en el seno de la máxima Central de Trabajadores. El pensamiento- de la mayoría es solicitar la afiliación ahora ad-referéndum de la próxima Asamblea General de Delegados quien será la que decidirá en definitiva. Se trata de legalizar una situación que se da en la práctica ya que desde hace años venimos acompañando todas les medidas de carácter general que decreta la cnt. Los compañeros de la lista 9 por supuesto están muy interesados, en que los. ferroviarios estemos en la CNT, pero no quieren afiliarse ahora. Por qué? Simplemente porque como la mayoría del Sindicato ha expresado públicamente su discrepancia con las tácticas empleadas por la mayoría de la Central temen que vayamos a ella a discrepar con dicha mayoría que casualmente tiene la misma afinidad política con los integrantes de la lista 9. Parecería que pretenden que cuando nos afiliemos sea para estar totalmente de acuerdo con la línea política  sindical que tiene la mayoría de la CNT y eso entendemos no es democrático, ya que los trabajadores debemos dar el ejemplo al Pueblo dejando si que las mayorías manden, pero permitiendo el libre juega de opiniones cuando tomemos nuestras decisiones. Además el mecanismo propuesto para afiliarnos ad-referéndum de la Asamblea de Delegados estatutariamente es correcto. Ya se hizo en oportunidad de afiliarnos a la msc y al Departamento de Trabajadores del Estado. También aquí será el Gremio quién en última instancia de su palabra reafirmando o rechazando las decisiones de los Dirigentes”.
            Sobre la aceptación de la formula económica se sostenía que “Se critica también a la mayoría por haber aceptado los $4.500.00 en lugar de $ 6.000.00- como planteado inicialmente. Sabido es que estaba todo pronto en afe para pagarnos los $ 6.000.00 pero el Poder Ejecutiva ordenó que nos pagaran las $ 4.500-, luego dos meses de $ 7.500— y luego seguíamos con los $ 6.000—, tal como se iba a proceder con la Administración Central. La plata estaba en afe y había dos caminos a seguir: no aceptar la fórmula del Ejecutivo y aplicar más medidas por los $ 6.000- o aceptar los S 4.500.— ahora y los $ 7.500.— luego, posibilitando a la vez un respiro para reanudar la lucha por la salvación del Ferrocarril. No se puede ser más realista que el Rey y se aceptó la fórmula propuesta incluso con los votos de los compañeros discrepantes. O que pretendían, que nos dejáramos destrozar inútilmente cuando prácticamente todos los funcionarios públicos habían aceptada. la fórmula y varios Entes Autónomos ya hacía 2 meses estaban cobrando el Adelanto?
            Finalmente con relación a los fines que perseguían los integrantes de la lista 9: “El fundamento que esgrimen es contribuir a la UNIDAD. El Gremio debería preguntase: Es de Unitarios confundir a 1os trabajadores con denuncias pre-fabricadas sobre presuntas irresponsabilidades, que al fin y al cabo trasuntan e1 desagrado de una minoría que no está conforme con la mayoría que el Gremio abrumadoramente eligió? Es que no tenemos problemas urgentes y agudos en los cuales sí debemos distraer toda nuestra atención? Si pretenden ser mayoría, porque no esperar el pronunciamiento del Gremio en las próximas Elecciones de Diciembre? Se pretende acaso frenar el avance cualitativo de las bases que están tomando conciencia gracias al empleo de métodos de luchas reales y no palabrerío hueco que hace pensar que avanzamos cuando en realidad retrocedemos? Son interrogantes que cada compañero se responderá personalmente ya que por una elemental razón de ética no vamos a. entrar en el terreno de opinar ni influir para que nos den la razón. Lo lamentable de todo esto es que más de un enemigo de los trabajadores, llámese jerarcas, policías o escuadrones, estarán regocijándose de ver como pueden deshacemos un día sin necesidad de preguntar o investigar, pues siempre habrá compañeros que estarán dispuestos a suministrarles los datos que precisan. Cuando nos repriman entonces se podrá ver más claro esto. Finalmente, hechas las aclaraciones debidas expresamos como Unión Ferroviaria, que será ésta  la única vez que saldremos a explicar o replicar ataques que a nada conducen. El tiempo es oro y lo precisamos mucho para resolver los problemas grandes, verdaderos, en los que nos va el destino de nuestros hijos y también el del Pueblo Oriental”.[2]








[1] Reunión abierta de la lista 9. Convocatoria de fecha 17-VII-72. Archivo del autor.
[2] Boletín de laUnión Ferroviaria, titulado aclaración al gremio firmado por el Consejo Directivo de fecha 12-V-72. Archivo del autor.

martes, 2 de noviembre de 2010

Capitulo XIII.1973.LA ANTESALA DE LA DICTADURA.

           




Capitulo XIII
1973.
LA ANTESALA DE LA DICTADURA.

            El 24  de marzo de 1973, la Federación Ferroviaria decreta de Estado de movilización en todo el gremio y participación en la jornada del 20 de marzo de la CNT y el Encuentro Nacional por Soluciones.
            El proceso de militarización del aparato del Estado en el Uruguay, en lo referente a los ferrocarriles se manifiesta en la instalación de un Directorio Interventor compuesto por el Coronel Martín Guarino, Iván Paulos y Yací Rivera. Estos a su vez nombraron asesor del Directorio al Capital de Navío Nelson Baruso. En la propia Asociación Latinoamericana de Ferrocarriles encontramos actuando como Secretario General al General de División ® Emiliano Flouret.
            El 27 de abril de 1973, se reúne la Federación Ferroviaria. A dicha reunión asisten delegados de la Unión Ferroviaria del Midland[1], la Unión Ferroviaria del Uruguay[2] y la Sociedad de Conductores de Coches Motores[3], para ajustar detalles de un acto programado para  del 15 de mayo en el Cine Sayago. Allí se pensaba realizar una entrega al Directorio[4] del organismo y dar a conocimiento de la opinión pública la posición de los ferroviarios con relación al futuro del ferrocarril. En esa reunión, se resuelve esa invitación, entre otras,  y la presencia en la mesa del acto de la cnt, en la persona de su presidente José D´Elia. Resuelto estos aspectos, la reunión consideró los cuatro puntos que se llevarían a una próxima entrevista con el Directorio de afe el próximo 30 de abril. Para esa entrevista, el Directorio había comunicado que recibiría al Presidente y al Secretario de la Federación, por lo que la filial de la Sociedad de Conductores de Coches Motores pone a discusión si a esa reunión sólo van el Presidente y el Secretario o todas las filiales. Según un acta manuscrita, “luego de un intercambio de ideas se llega al acuerdo de que entren los nombrados y expliquen el funcionamiento para que las demás filiales puedan estar presentes”.[5]
            En una de las actas, se consigna al final de la misma que “se nombra al Sr. Secretario O. Vidal para la Mesa Representativa de la cnt”.[6]
            El 30 de abril de 1973, la delegación de la gremial de los ferroviarios, mantiene la entrevista programada con los tres titulares del Directorio. Los 4 puntos que allí se llevaron, ya habían sido puestos en conocimiento de las autoridades con anterioridad mediante una nota. La Evaluación de tareas, la compensación por Mayor Horario y el reclamo de ropa de trabajo para los trabajadores, logran muy poco avance en las respuestas que reciben, ya que todo “queda condicionado a la previsión de los rubros presupuestales[7]. Ante la invitación al acto del cine Sayago, no reciben una respuesta favorable. Gran sorpresa debió recibir la delegación obrera, cuando antes de retirarse, reciben de los militares que integraban el directorio de la empresa ferroviaria, un pedido y una advertencia: piden  colaboración para tratar de sacar del pozo en que está el ferrocarril” y advierten que “nadie presente recomendación de políticos porque no serán atendidos, que con borrachos, ladrones y haraganes no tendrán ningún miramiento”.[8]
            Tres días después, el 3 de mayo, sesiona el Consejo Federal de la Federación Ferroviaria con la asistencia de todas las filiales. Al informar lo tratado en la última reunión con el Directorio y en ella la repuesta negativa del Directorio de concurrir al acto del día 15, se resuelve igualmente realizarlo, pues “no había elementos de juicio para no hacerlo[9].
            El 10 de mayo la Federación Ferroviaria en una nota firmada por Ramón Martínez y Otto Vidal solicita al Directorio de afe participación en la Comisión de Presupuesto “teniendo en cuenta que la elaboración del presupuesto, supone un estudio lógico de necesidades en cuanto a inversiones que a su vez deben corresponderse  con metas, lo que implica definición del destino que se le adjudica al sistema ferroviario en los programas generales de desarrollo, y que además a dicho estudio, corresponde definir la estructura presupuestal en lo funcional y su dotación salarial…[10]. En cuanto a la negativa del Directorio militar de concurrir al acto del cine Sayago “para recibir oficialmente y en presencia de los funcionarios ferroviarios un documento en el cual se plantean nuestras concepciones respecto al problema ferroviario, encuadrándolo en la problemática general de los transportes…”, la nota aboga por la presencia del mismo, expresando “que siendo la decisión final de exclusivo resorte del Directorio que Ud preside, confiamos en que vuestra presencia permita cumplir una de las finalidades esenciales del acto, que no es otra que los trabajadores ferroviarios, como ciudadanos de este país y como sector social directamente involucrado plantee directamente y con seriedad las concepciones por las cuales lleva tantos años de lucha”.[11]
            El 15 de mayo a las 20 y 30 da comienzo la asamblea informativa, ante un público, mayoritariamente de trabajadores ferroviarios que habían concurrido desde diversos puntos del país, que colmaban las instalaciones del viejo cine del barrio de Sayago. Quién primero hace uso de la palabra,  es el Presidente de la Federación Ferroviaria, Ramón Martínez. Ramón saluda especialmente la presencia del Presidente de la cnt José D´Elia y de Julio Guillot que lo hacía en representación de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República. Luego da lectura a una nota del Directorio de afe, en el que se excusa por su ausencia y reitera el ofrecimiento de la sala de sesiones del Directorio para recibir el Memorando sobre la Recuperación de afe.
            Luego hace uso de la palabra Otto Vidal para referirse al contenido del Memorando que se hacía público en ese acto. Antes de terminar su intervención “y en forma personal expone artículos de la Ley Sindical y se declara contrario a la misma, diciendo que significara en manos de un gobierno irrespetuoso de la ley y el orden una mordaza y represión para las reivindicaciones y a esta clase de denuncias y manifestaciones, ya que significará la paralización practica de nuestro sindicato. Finalmente anuncia “que luego el Consejo Federal estudiaría esta reglamentación y procedería en consecuencia[12].
            En lo referente al documento que los ferroviarios ponían en conocimiento de la opinión pública, la intervención de Otto Vidal comienza afirmando que “El presente trabajo, tiene como objetivo, una vez más denunciar la situación de crisis del transporte estatal ferroviario y su cada vez más evidente desaparición del mercado de transportes del país”. Antes de extenderse en un prolijo examen de distintos aspectos de la problemática ferroviaria, expresa que “Intentamos demostrar que por lo menos, es posible detectar el espectacular caos que en materia de transportes existe y el tremendo daño social y económico que produce, y que ello no es ajeno a la problemática general, pues responde a las mismas causas”.
            Al referirse a las conclusiones finales, expresa el orador “La constitución del año 1967 crea el Ministerio de Transportes, Comunicaciones y Turismo. Desde entonces a la fecha se sucedieron 6 Ministros. En el mismo periodo 4 Directorios, 3 de ellos en régimen de intervención. En su momento, públicamente todos se preocuparon por la suerte del ferrocarril, incluso el Sr. Presidente. Ya hemos expuesto los resultados de esa preocupación. Importa señalar, que más allá de la ironía que pueda trascender de esta afirmación, la constatación más clara que hacemos los trabajadores, es que en este país ya no tiene más cabida la mentira demagógica ni la mentira subalterna ni interesada. Es el país como tal, en su aspecto económico y en su complejo social que no tiene más tolerancia”.
            Luego de enumerar algunas medidas inmediatas tendientes a evitar la paralización de AFE, Vidal concluye que “A lo largo de los años, el gremio ferroviario, ha sacrificado muchos jornales en esta lucha,. Esos jornales perdidos por paralización de actividades, no han sido, sin duda, factor de la ruina ferroviaria, ni del cos general en materia de transportes. Afirmamos que esos jornales perdidos por paros y huelgas defendiendo el ferrocarril, fue la única inversión seria que se hizo en su favor fundamentalmente durante estos dos últimos gobiernos[13].
            Estando nuevamente en uso de la palabra, Ramón Martínez denuncia la detención por la policía de dos camiones que se dirigían a una concentración de la CNT en el Palacio Legislativo, y exhorta a los concurrentes al acto a colaborar con los obreros de la vecina fabrica de ladrillos Méndez y Cia que se encontraban en conflicto. Para cerrar el acto, hace uso de la palabra José D´Elia, “en un saludo y bastante buena oratoria sobre problemas que no son de nuestro gremio”.[14]
            En días posteriores[15] al acto del Cine Sayago, la Federación Ferroviaria remite a los ferroviarios un comunicado gremial bajo el título de “Alerta al Gremio: Reglamentación sindical- ¿Qué pasara?” Allí se consigna que ”…el gobierno vuelve a insistir en su tesis de seguir legislando para reprimir y pone su miope punto de vista en la actividad de los sindicatos, anunciando el envió de un proyecto de ley para reglamentar el funcionamiento de los mismos. Frente a este hecho, de enorme trascendencia para el movimiento sindical y muy en particular para nuestro gremio, por sus características y por las intenciones y filosofía que ha trascendido de lo que se pretende legislar, la Federación Ferroviaria ha resuelto: emitir un volante explicativo (…) organizar una red de asambleas en todo el país (…) decretar al gremio en Estado de alerta”.
            Un acta manuscrita[16] da cuenta de la discusión que en el seno del Consejo Federal de la Federación Ferroviaria, genero la amenaza de un decreto de reglamentación sindical y las medidas de lucha que la CNT había resuelto desarrollar en caso de aprobarse la misma. Por la Unión Ferroviaria del Uruguay asisten los compañeros Ramón Martínez  y Gilberto Coghlan, y por la Unión Ferroviaria del Midland los compañeros Pereda Das Neves y Cándido García.[17] La CNT había dispuesto que en caso de aprobarse la Ley de Reglamentación Sindical un paro de 24 horas, y que en caso de que su aprobación fuera por Decreto al amparo de las Medidas Prontas de Seguridad, también ocupar los lugares de trabajo donde existieran condiciones para hacerlo. La Unión Ferroviaria del Uruguay, concurría a esa reunión de la Federación con la posición ya resuelta por su Consejo Directivo, de realizar un paro de 24 horas en todo el país a partir de la hora 7. Es decir, correr los trenes hasta la hora 7 y a esa hora ocupar los lugares de trabajo en Montevideo. Con respecto al interior, tenía la posición de no imponer la ocupación, sino que se evaluara en cada lugar esa posibilidad. Los delegados de la Unión Ferroviaria del Midland, sostienen que “la ocupación es una medida nula dado que siempre fueron desalojados por la fuerza. Ellos están dispuestos a acompañar el paro pero no la ocupación”. La Unión Ferroviaria fundamenta la importancia de la medida de ocupación “para dialogar con los compañeros” y en aquellos lugares “donde trabaja mucha gente”. Gilberto Coghlan dice: “A nosotros ningún proyecto nos sirve, dado que a los sindicatos les ha constado sangre tener muchas mejoras que han logrado. La ley quiere que  tener en los sindicatos gente que les sirva a sus fines, para tener a los obreros callados. El gobierno sabe que el movimiento sindical va a responder con medidas”. El delegado de la gremial ferroviaria del litoral uruguayo, se preocupa de dejar claro que no está “a favor de la Ley Sindical, pero que no la conocen y que no se gana nada con la ocupación, que va a ser contraproducente (…) lo que hay que hacer es un paro de 24 horas y si se aprueba una huelga general. Que va a pasar lo mismo que con la ley de Enseñanza, que no se puede hacer un paro y después de implantada al otro día se entra a trabajar como si no hubiera pasado nada”. Ramón Martínez admite que “Desde luego que con el paro no se va a parar la Reglamentación Sindical, pero con la ocupación el gobierno va a valorar más la resistencia obrera”.
            La delegación de la Sociedad de Conductores de Coches motores, deja constancia “que como siempre en disconformidad, acata la mayoría pero desde ya cree que la Reglamentación se aprobará por más días de trabajo que pierdan los ferroviarios, que hay muchos puntos por lo que pelear”.
            Finalmente prima la posición de la Unión Ferroviaria, que por otra parte tenía la mayoría en la Federación, y la Federación Ferroviaria se sumaría a la resolución de la cnt.
            El 24 de mayo de 1973, el Consejo Federal de la Federación Ferroviaria recibe la Circular de la cnt sobre la Reglamentación Sindical y el documento de la cnt a las Fuerzas Armadas.[18]
            El 15 de junio, nuevamente la gremial ferroviaria cursa nota al Directorio denunciando “problemas que afectan agudamente a un sector del personal del Organismo, y sin lugar a dudas el más sacrificado y que debe realizar las tareas más rudas, los funcionarios de las Cuadrillas de la Gerencia de Vías y Obras”.[19]
            El 25 de junio de 1973, dos días antes del golpe de Estado, la Federación Ferroviaria mediante una nota elevada a el Presidente del Directorio el Coronel Martín Guarino[20], intentaba que se diera cumplimiento a una formula de acuerdo  que había elaborado la Comisión de Legislación del Trabajo de la cámara de diputados el 5 de octubre del año anterior en torno a los viáticos y compensaciones por desplazamiento y Olla que cobraran los trabajadores de afe.
            Según dicha formula, además de que se adelantara al ente ferroviario una suma de dinero con destino al aumento de esas compensaciones el Ministerio, establecía la instalación de una Comisión mixta[21] (afe – Federación Ferroviaria) para que estudiara una nueva reglamentación y los montos de esas compensaciones. La gremial pretendía que se hiciera “efectivo el ajuste de estos valores, desde el 1 de enero del corriente año”.







[1] Documento de archivo del autor. No es legible el nombre de los delegados del Midland.
[2] Ángel Álvarez, Walter Caulia, Otto Vidal y Medina.
[3] Costa y De los Santos. En una nota del 6.12.72, se documenta a como integrantes y7o delgados de esta filial a los  Cros. Cardozo, Bado y Omar Piñeiro. Documento de archivo del autor.
[4] El 3 de abril de 1973 , el ESMACO se transforma en un órgano de estudio, asesoramiento y coordinación del Poder Ejecutivo a partir de que  había  sido facultada la junta de Comandantes en Jefe a asesorar en materia de defensa y seguridad nacional y proponer a solicitud del Poder Ejecutivo, los candidatos militares para ocupar puestos en el Estado. En ese marco el 8 de abril,  militares son designados directores interventores en AFE, y en otros organismos estatales.
[5] Documento de archivo del autor.
[6] Ibid.
[7] Ibid.
[8] Ibid. Nota manuscrita que no da cuenta de la integración de la delegación gremial, ni de la opinión vertida por ella. Si da cuenta de que en esa reunión les presentan al nuevo interventor de la Gerencia de Hacienda y al nuevo Gerente General (Ing. Campal).
[9] Ibid. Trascripción textual de una nota manuscrita de autor desconocido.
[10] Ibid.

[11] Ibid.
[12] Ibid. Nota manuscrita de autor desconocido.

[13] Ibid.
[14] Ibid.
[15]  Ibid. Este material, al parecer esta incompleto y carece de fecha.
[16] Ibid. El material, que carece de fecha y parece estar escrito por el delegado de la filial de la Sociedad de Conductores de Coches Motores.
[17]  Además de ese tema, la reunión trató los problemas pendientes a consideración del Directorio, la Plataforma de la Mesa Sindical Coordinadora de Entes Autónomos y Servicios Descentralizados y la realización de un Congreso del Personal de Conducción y Guardas.

[18]  Boletín de la Federación Ferroviaria. Archivo del autor.
[19] Ibid.
[20] Ibid.
[21] L Comisión se había instalado el 13/10.72 y había finalizado su trabajo el 2/1/73, estuvo presidida por el Ing. José LLambías.

miércoles, 6 de octubre de 2010

Capitulo XIV.LOS FERROVIARIOS EN LA HUELGA GENERAL.






Capitulo XIV

LOS FERROVIARIOS EN LA HUELGA GENERAL.

            El libro de Alvaro Rico en sus primeras páginas[1] informa que la dictadura organiza cerca de 42 plebiscitos durante el curso de la huelga general. De esos 42, tres son en organismos del Estado y uno de ellos es AFE[2]  y 39 en empresas privadas.
            Una primera observación que no es menor. El libro dice textualmente “El régimen organiza cerca de 42 plebiscitos…”. En realidad el régimen dictatorial impulso a través de una predica constante y machacona en todos los medios de difusión controlados y censurados, la realización de plebiscitos por voto secreto como medio de romper la huelga, y cuando los trabajadores por las razones que fueran decidían discutir la continuidad o no de la huelga, permitió que los mismos se realizaran. Hasta ahí, fue la intervención de la dictadura en la realización de esas instancias de resolución, pero de ahí no puede afirmarse ni concluir que el régimen los “organiza”.
            No puedo realizar una generalización, pero si puedo afirmar que en AFE y hasta donde estoy informado, ninguna organización sindical – y donde se estaba llevando a cabo la huelga general y la dictadura pretendía que se levantara, existía una organización gremial- permitiría que el régimen le “organizara” una consulta con los trabajadores. Seguramente existieron trabajadores que fueron influenciados por la predica del régimen, y otros que por otras consideraciones evaluaron la imposibilidad de mantener las medidas de lucha. Pero lo que es claro, es que la palabra “organizar”, es altamente inadecuada e inexacta para catalogar esa acción del régimen para concluir con la resistencia al golpe de Estado. Sobre todo, porque una de las partes esenciales de la actividad sindical de los trabajadores es justamente, la organización propia. Aun, para cuando tienen que resolver el levantamiento de una medida, que a veces implica la aceptación, siempre transitoria, de una derrota coyuntural.
            El mismo libro en otro apartado titulado “Bolentini propone plebiscitos obreros”, se da cuenta de declaraciones del Coronel Néstor Bolentini a la prensa, en la aquél afirma que “el Gobierno considera eficaz la realización del plebiscito en los que los personales de cualquier labor paralizada puedan expresar mediante el voto secreto su voluntad de trabajar o no. Esos actos contarán con todas las garantías que los interesados requieran al poder público”.[3]
            Este desliz conceptual en el que cae el libro, puede llevar a equívocos en las nuevas generaciones, que enfrentadas a este texto puedan concluir que las fuerzas armadas nos convocaron y nos organizaron las instancias en que algunos gremios resolvieron concluir- por las razones que fueran- con la resistencia mediante la huelga y la ocupación de los lugares de trabajo a la instalación de la dictadura.  Las únicas garantías que se reclamaron, en medio de un clima de represión generalizada, era que no fuera reprimida la realización de asambleas de trabajadores.
            A renglón seguido, el libro dice que de los 42 plebiscitos, 5 no se realizaron[4] por escasa concurrencia y que de los 37 restantes, 35 plebiscitos resultaron favorables a reintegrarse al trabajo y dos “terminaron negativos al reintegro”.
            Entre los 5 que no se realizaron y los dos que no resolvieron el reintegro al trabajo, no esta consignado que entre ellos estuvieran los trabajadores ferroviarios, por lo que debe concluirse que además de que el régimen nos “organizó” un plebiscito, el que realizaron los ferroviarios esta en la categoría de los que resultaron favorables a reintegrarse al trabajo.
            Pero a renglón seguido, se aclara las particularidades que tuvieron esos 35 plebiscitos: 9 de ellos resolvieron por unanimidad reintegrarse al trabajo[5].  En la lista que el libro trascribe, según lo publicado por el diario “El País” del 14 de julio de 1973, no figura el de afe, por lo que por lo que hasta ese momento informa el citado libro, el plebiscito en afe no fue resuelto por unanimidad.
            Sobre el mentado plebiscito en afe, el libro más adelante aporta otra información al consignar los hechos del día 5 de julio[6]. “Siguen los Plebiscitos. Los trabajadores son convocados e intimados a concurrir a su fábrica. Bajo la presencia de las fuerzas represivas y de la patronal se organizan votaciones para determinar si se entra o no a trabajar.(…) El plebiscito realizado en AFE resulta favorable a reintegrarse al trabajo. No se proporcionan cifras oficiales”. En afe, no existió nunca durante la huelga general  plebiscito alguno y menos aún con presencia de las “fuerzas represivas”.
            También el libro trascribe declaraciones de Bolentini,[7] en la que el militar dice:”Entablamos entonces un diálogo intenso con multitud de delegaciones de trabajadores que, abandonados por sus dirigentes, llegaron hasta aquí para conversar. De esta manera se forjó la progresiva normalización del trabajo pues numerosísimos sindicatos con la garantía del voto secreto (CUTCSA, ONDA, cutcsa, onda, afe, cita,  etc.) decidieron retomar la labor. La experiencia favorable del voto secreto, es tal vez lo más positivo de estos días”. El Comunicado Nº 115[8] del régimen complementa esa versión del Coronel Bolentini y que se refuerza con la versión que con relación a los trabajadores ferroviarios da el libro de Rico. “Gran cantidad cíe sectores de la actividad laboral han vuelto como resultado de la decisión mayoritaria lograda mediante el plebiscito por voto secreto. Ejemplos como los de afe, Cía. del Gas, del Transporte capitalino e interdepartamental y gran cantidad de establecimientos privados, demuestran claramente que la voluntad de la masa obrera de reiniciar su trabajo en bien del país, de la comunidad y de su propia familia, es muy superiora al efecto que sobre ella pudo haber tenido la presión ejercida por minorías organizadas[9], mediante la amenaza y la propaganda intensiva. El pueblo uruguayo espera con fe que éste sea el camino que han de tomar los trabajadores, que aún no han resuelto el retorno a sus tareas”.[10] Reitero, en afe ni hubo plebiscito, ni voto secreto, ni resolución alguna de Asamblea de sus trabajadores que resolvieran el levantamiento de la huelga general. Y menos aún, que “delegaciones de trabajadores que, abandonados por sus dirigentes (…) con la garantía del voto secreto (…) decidieron retomar la labor.

            Ya hemos intentado aclarar, la inflexión conceptual que se desliza, cuando al referirse a un eventual plebiscito en AFE, se firma que fue organizado por el régimen. Pasemos ahora a otros aspectos no menos importantes. Un primer aspecto tiene que ver con lo que se entiende por Plebiscito. El diccionario establece que esta modalidad de consulta es tomada por mayoría de votos. A diferencia de una resolución también tomada por mayoría de votos, un plebiscito se diferencia de una asamblea de trabajadores, en que es tomada mediante el voto secreto y que por lo general es para tomar una resolución a favor o en contra. Un plebiscito durante la huela general, según surge de la predica del régimen y de la información que brinda el libro de Rico, era el simple y único acto de votar en forma secreta si se continuaba o no la huelga general. De atenernos a lo que documenta el citado libro, a los trabajadores ferroviarios (abandonados por sus dirigentes), aceptaron que “bajo la presencia de las fuerzas represivas, estas le organizaran un plebiscito para que por “decisión mayoritaria lograda mediante el plebiscito por voto secreto”, resolvieran “claramente que la voluntad de la masa obrera de reiniciar su trabajo en bien del país, de la comunidad y de su propia familia, es muy superiora al efecto que sobre ella pudo haber tenido la presión ejercida por minorías organizadas”.

            Es cierto que los trabajadores ferroviarios organizados sindicalmente en  la Federación Ferroviaria, abandonaron la medida de huelga general antes de la resolución de la Mesa Representativa de la cnt. La Mesa Representativa resuelve el levantamiento de la huelga el 11 de julio, mientras que en afe esto se resuelve el 8 de julio.

            ¿Quién y cómo se levanta la huelga general?

            El desarrollo de la huelga en los ferrocarriles empieza el 27 de junio en las primeras horas de la tarde y es en todo el país.   
            En Paysandú, lugar donde esta enclavado otra gran concentración de ferroviario, ya que allí estaban instalados otros de los grandes talleres que junto al de Peñarol y el de Piedra Alta, atendían las necesidades del entre ferroviario. En esa ciudad estaba radicada la cabeza de la segunda filial en número de afiliados de la Federación Ferroviaria: la Unión Ferroviaria del Midland. Por otra parte esta ciudad, era la segunda en importancia del país: Alli los ferroviarios, tienen una activa participación en el  movimiento huelguístico, acompañando a los obreros textiles, de las curtiembres, bebida, aceiteros, municipales, del portland, bancarios, frigoríficos, construcción, del de dulce, estudiantes, docentes y funcionarios de la Universidad de la República.[11]
            Luego de producirse el desalojo de los talleres Peñarol que habían sido ocupados, la misma continúo. La versión del gobierno dictatorial, trataba mediante información falsa, afectar la firmeza que los ferroviarios desarrollaban.[12]
            Pese al anuncio del gobierno realizado el 30 de junio de que los ferroviarios se estaban reincorporando a sus tareas, el 1º de julio, el Directorio interventor, realiza un emplazamiento a los ferroviarios exigiendo la presentación del personal para el lunes, amenazando con sanciones por no hacerlo[13]. Ese mismo día el comunicado oficial Nº 36 daba cuenta que en afe se estaba en “vías de normalizarse”.[14] El lunes 2 de julio, pese a las intimaciones, continua la huelga en los ferrocarriles[15].
            Dos días después, el 4 de julio, el comunicado oficial del gobierno Nº 46, vuelve a anunciar que en AFE las actividades “comienzan a regularizarse”.[16]
            Una información que no hemos podido confirmar, da cuenta que el 6 de julio, en Paso de los Toros un tren que corría desde Montevideo a Rivera, fue abandonado en esa ciudad por los obreros ferroviarios en huelga[17]. Durante toda la huelga general, las autoridades militares de afe intentaron correr trenes con “carneros”. Distintas formas de sabotaje y bloqueo de las vías, impidieron mientras se mantuvo la huelga, que saliera ningún tren desde Peñarol o Bella Vista, las dos remesas de locomotoras ubicadas en la capital. Lo que no quiere decir que no haya existido la intención de hacerlo desde la remesa de Paso de los Toros y allí haya ocurrido el hecho que se menciona.
            Las distintas agrupaciones existentes en la dirección del gremio, habían resuelto constituir un Comité de Huelga reducido (5 integrantes) que supliera el funcionamiento regular de un Consejo Directivo que en caso de la Unión Ferroviaria, una de las tres filiales que constituían el Consejo Federal de la Federación Ferroviaria, era de 30 miembros. El Comité de huelga oficiaba de lugar de resolución de las posiciones que allí trasladaban las 4 listas existentes. El funcionamiento colectivo más amplio era responsabilidad de cada una de las listas por separado. También el comité de huelga, había delegado responsabilidades en la atención del vínculo con los distintos sectores de trabajo, mediante mecanismos que cada sector iba definiendo según las condiciones existentes.
            El 7 de julio a propuesta de la lista 5, en las primeras horas de la tarde se reúne el comité de huelga para evaluar el desarrollo de la paralización a nivel del gremio.
            La reunión se realiza en el local sindical de la Avenida Sayago 1507. Allí, Ramón Martínez[18] a la postre Presidente de la Unión Ferroviaria y quien representaba a la lista 5 en el comité de huela conjuntamente con Otto Vidal, realiza un informe de la situación existente en los sectores administrativos de la estación central, sobre los que ellos tenían la responsabilidad de mantener los vínculos. Según la situación existente allí y en otros lugares del país, Ramón Martínez plantea la necesidad de convocar a una asamblea del gremio para levantar la huelga. Sostiene que en varios sectores crece la necesidad de levantar la huelga y que es mejor que si se llega a esa resolución, la misma se realice de forma orgánica por la dirección del gremio. Adelanta que ya habían realizado gestiones antes las autoridades para que se autorizara esa asamblea, que se realizaría esa noche misma. En el interior del país, a la desinformación y los comunicados oficiales de la dictadura, se sumaban algunos medios de prensa, como el  periódico “Norte” de Rivera que informaba el 2 de julio que “Será normal la actividad en afe y Bancos. Claro que esta es una opinión aventurada, totalmente extraoficial. Pero de acuerdo al trabajo de encuesta realizado anoche, el 100% de los funcionarios de afe estarán a la orden, al igual que los bancarios”.[19]
            El delegado de la lista 13, que representaba a la agrupación de la roe, sostiene que en el sector sobre los que mantienen vínculos estrechos y regulares, refiriéndose a los sectores obreros de los talleres de Peñarol  y las estaciones de la zona local, la situación es aún firma de adhesión a las medidas. Esta de acuerdo en que se realice una asamblea para analizar la situación, pero no está de acuerdo en que ella sea ese mismo día, pues existían dificultades para convocar a una cantidad importante de trabajadores y se corría el riesgo de que sí, concurrieran en forma masiva aquellos sectores más proclives al levantamiento de la huelga.
            Pedro Toledo, representante de la lista 9 identificada por la agrupación del Partido Comunista, si bien se afilia a la realización de la consulta, defiende la necesidad de tener en cuenta las resoluciones de la conducción de la cnt.
            Por la vía de los hechos, ya estaba decidida la realización de la asamblea, por lo que era muy importante fijar la posición que a ella llevaría la dirección del gremio. Aquellos que valoraban que ya no se podía mantener la huelga y que había que levantarla, fueron en principio proclives a no influir en la decisión. No llevar posición.
            No recuerdo la posición de los compañeros de la lista 1, aunque reo que en esos momentos estaban algo desmembrados por la detención y posterior procesamiento de algunos de ellos por su vinculación con el mln.
            Nosotros sostuvimos que la dirección debía llevar una posición y que ella debía ser formulada al inicio de la asamblea. Esa posición debía ser que “manteniéndose las causas que dieron origen a la huelga general (el golpe de Estado), debería mantenerse la medida”. Esa propuesta es aceptada por todos, con el agregado que plantean los compañeros de la lista 5, de que luego de formulada esa opinión de la Directiva, ningún dirigente de la misma daría su opinión personal. Se acuerda ese criterio de conducta.
            Las horas que separaban de la asamblea, fueron usadas para tratar de divulgar entre los compañeros su realización y lograr la mayor asistencia. Estaba claro que la asistencia a la misma, se circunscribiría a Montevideo y algunas zonas muy cercanas, ante la falta de locomoción. Pero también era claro que la importancia que tenía la huelga ferroviaria en el marco de la movilización general, era que no corriera ningún tren y para eso era estratégico los sectores (Remesas y Talleres y las Estaciones) de Montevideo. Ya se habían frustrado varios intentos de las autoridades de afe, de lograr que saliera un coche motor de central recorriendo el trayecto de la zona local. Se quería que esa unidad saliera y recorriera las vías tocando silbato, así de esa manera se señalaría al conjunto de fabricas (textiles, etc.) instaladas a los costados de las vías, que también los transportes ferroviarios habían sido doblegados.[20]
            Pasadas las 19.00 horas, en las instalaciones del local que tenía en construcción la Unión Ferroviaria a pocas casas de su local sindical y con una presencia que colmaba las instalaciones de su primer piso y extendiéndose por las escaleras a medio construir, dio comienzo la asamblea. Tal como estaba acordado, Ramón Martínez dio comienzo a la misma, trasladando la opinión resuelta por la dirección: ya que se mantenían los hechos que dieron origen a la huelga general, ésta debía mantenerse en todos sus términos. A partir de ahí, los directivos nos mantuvimos en silencio, dando lugar a las intervenciones de los asambleístas.
            Era claro el clima que se vivía. Los compañeros de base de la tendencia y los comunistas, hacían uso de la palabra acompañando la posición que había trasladado la dirección del gremio. Compañeros afín a la lista 5, afín a los socialistas, mantenían una actitud activa en la asamblea, aunque no hacían uso de la palabra y en los casos que lo hacían respaldaban a la dirección pero evitaban ser categóricos con relación a la posición que finalmente se debía asumir. Otro sector, que no era el que habitualmente se veía en las asambleas, mantenía silencio y era claro que habían venido a levantar la mano para levantar la huelga.
            Para nosotros estaba claro que con diferentes valoraciones, podría existir una mayoría no muy amplia, pero que levantaría la huelga. La dificultad para que eso cristalizara, radicaba que esa resolución iría contra la opinión manifestada por la dirección. Y esto en nuestro gremio y en esos años, era difícil que se materializara. Se respetaba con exceso, la opinión de los dirigentes.
            Cuando ya había trascurrido un poco menos de una hora de iniciada la asamblea, se produce la llegada al local de varios camiones del ejército que rodean el edificio, irrumpen en la sala portando ametralladoras y empiezan a desalojar el local. Mientras las autoridades del dialogan con el oficial que pistola en mano conducía el operativo desde el estado, los ferroviarios eran puestos contra la pared con las manos en alto a lo largo de la avenida Sayago por ambas aceras. Desde la altura del Ce.So.Pe[21] hasta casi Aparicio Saravia.
            Cuando los soldados se dieron cuenta que las filas de ferroviarios contra la pared se extendía demasiado y se corría el riesgo de que la cantidad de efectivos no dieran a basto para mantenerlos bajo vigilancia, se suspendió la sacada para fuera y se opto por mantener al resto dentro del local. Luego de medía hora y de consultas por las radios portátiles, el oficial recibió la información de que dicha asamblea había sido autorizada y optaron por retirarse.
            El clima con el que regresan a la asamblea los trabajadores era de profunda indignación. Finalmente se vota una moción que planteaba respaldar la posición llevada a la asamblea por la dirección del gremio. La huelga se mantenía y por un respaldo muy amplio.
            Cuando parecía que habían quedado resueltas las diferencias que realmente existían en el seno de la dirección del gremio, un integrante de la asamblea solicita la palabra. Se trataba de un compañero de base, que claramente estaba identificado por las posiciones de la lista 5, proclives en ese momento al levantamiento de la huelga. En su intervención expresa su confianza en las resoluciones de la dirección del gremio y formula una nueva moción que no contrapone a la votada anteriormente, pero que dejaba en manos de la dirección la resolución futura sobre la continuidad o no de las medidas.
            Quienes percibimos que atrás de esa nueva moción se intentaba revertir el resultado negativo al levantamiento de la huelga por la asamblea, planteamos que la misma había sido convocada para resolver si se continuaba o no la huelga y eso había sido resuelto por el voto mayoritario, por lo que estaba de más resolver otra cosa, y nos retiramos de la misma.
            La asamblea, o lo que quedaba de la misma, vota afirmativamente un apoyo a la dirección y dejar en sus manos la resolución. Estaba claro que se votaba algo confuso, por lado el apoyo a una dirección que no estaba en discusión y que por otra parte había llevado la posición de mantener la huelga. Y por otro lado, habían quienes sabían y por eso depositaban en la dirección la resolución, que la mayoría de la dirección (lista 5) era partidaria de levantar la huelga.
            La huelga continuaba. Algunos compañeros, Roberto Pérez entre otros, salieron a recorrer algunos lugares del interior, para seguir sosteniendo la huelga.
            Al otro día se reúne el Comité de huelga. Allí en función de lo resuelto en la última moción aprobada por la asamblea, los compañeros de la lista 5, proponen levantar la huelga. Los delegados de las listas 5 y 9 (no recuerdo si estaban los compañeros de la lista 1), votan en primera vuelta negativamente en función de acatar la resolución original de la asamblea. Luego de una larga discusión Pedro Toledo (lista 9), dice sumarse a la posición mayoritaria de levantar la huelga y hace un llamamiento para que la lista 13 también lo haga, para que no existiera una división en la dirección. No es aceptada y con el voto en contra del delegado de la lista 13, se resuelve levantar la huelga el día 8 de julio.
            Sin embargo sobre la fecha de levantamiento de la huelga en afe, el libro de Álvaro Rico genera una nueva confusión. Según dicha material el viernes 6 de julio el personal ferroviario se presenta a trabajar desde ayer, por lo que la fecha de levantamiento de la huelga esta ubicada el día 5 de julio[22]. Sin embargo al consignar los sucesos del día 8 de julio, se informa que “Salen ferrocarriles de Estación Central y a determinada altura de su recorrido los maquinistas “se pierden” entre las vías o bien en tren se rompe o se da el caso de que no pueden circular porque hay barricadas en las vías[23]. También ese día, en el que supuestamente se levanta la huelga, el libro de Álvaro Rico incorpora una información. Según la cual los ferroviarios en Paysandú realizan dos asambleas “que resuelven ir a trabajar sólo cuando las Fuerzas Conjuntas empleen la fuerza para obligarlos”. Y que cuando los militares intentan conducirlos a la fuerza a los lugares de trabajo, “se niegan a subir al camión (…) y se trasladan a pie al cuartel de la capital sanducera manifestando por la calle y cantando el himno nacional. Por el camino reciben el apoyo de otros sindicatos. Fueron retenidos durante algunas horas y regresan al centro de la ciudad de la misma manera”.[24]
            Mas adelante, cuando realizan un cuadro de empresas, fábricas y organismos que el día 12 continúan ocupados, se informa que en AFE: “Estaciones y Talleres en Peñarol”.[25]
            Por si existen dudas sobre la fecha exacta del levantamiento de la huelga en afe, también puede recurrirse al Documento de las “Tres F” (fus, foeb, funsa) quien establece dicho levantamiento entre el día 4 y 8 de julio: “En los días 4 al 8 de julio se desmorona la huelga en el Transporte y se levanta en Municipales, estibadores, todo SUANP y Ferroviarios…”.[26]
            Pese a los avatares del gremio ferroviario, la cooperativa de consumo del personal de AFE, el día 9 mantenía la huelga.[27]
            Luego de la represión desatada contra la movilización realizada en el centro de Montevideo el 9 de julio, los ferroviarios deciden parar 24 horas en repudio a esos hechos.
            Para la instrumentación de ese paro y para evitar que el Directorio corriera algún tren con “carneros”, la noche del 9, concurrimos con Gilberto Coghlan a la estación Colón para esperar un tren de carga que llegaría a la media noche hasta allí. La llegada de ese tren en momentos que empezaba el paro de 24 horas, nos permite el bloqueo de las vías en esa estación y ocultar las llaves de la maquina. En eso momento actuaba de jefe de dicha estación Luis Alberto Raymundo, un ex integrante de la directiva del gremio  e integrante de la ROE, lo que da motivo para la detención del mismo por los militares. Raymundo es internado en la Escuela de Armas y servicios, en el kilómetro 14.

            Luego de culminada la huelga general y en el curso del mes de julio de 1973, la Federación de Obreros y Empleados de la Bebida, la Federación Autónoma de la Carne, la Asociación de Empleados y Obreros de Conaprole, El Sindicato Único Nacional de la Construcción, la Federación Ferroviaria, la Unión Nacional de Trabajadores del Metal y Ramas Afines y el Congreso Obrero Textil, emiten un comunicado dirigido al Ministro de Trabajo y Seguridad Social y a la opinión pública en el que dicen que “Interpretando sin duda el sentir de la totalidad del movimiento sindical uruguayo auténticamente representativo, sin perjuicio de la opiniones que sobre la situación general del país sustentan las respectivas gremiales, desean puntualizar” sobre un “dialogo del gobierno con los sindicatos”.
            El comunicado de los sindicatos subraya “que mal puede hablarse de diálogo en tanto se producen (…) prisión y requerimiento, en el marco de las “medidas prontas de seguridad”, de dirigentes y militantes sindicales, los que, en algunos casos, han sido objeto de malos tratos (…) clausura de locales sindicales, con incautación de bienes (…) despidos masivos, en la actividad privada (…) despidos, pases a disponibilidad, sumarios y sanciones” en la actividad pública. Sobre estos aspectos que los sindicatos afirman que reputan como “absolutamente prioritarios”, “planteamos su intervención”.
            Sobre la política salarial, sostienen que “debe ser revista (…) con inmediatez”. Luego de argumentar en contra del decreto de aumento del 25% y el 27% para públicos y privados respectivamente y plantear que el aumento “debía oscilar entre un 65 y 80%”, concluyen que “hay una realidad irrebatible: es imposible vivir con los salarios actuales (…) a lucha por un salario decoroso (…) es un objetivo básico de todo sindicato, su elemental razón de ser y que, por consecuencia, ningún gremio puede renunciar a la misma”.[28]
            El manifiesto, culmina  informando “que para dar cuenta del resultado de esta gestión, hemos convocado a los sindicatos para una reunión a realizarse (…) en la Federación Autónoma de la Carne (…) por lo que solicitamos quiera disponer lo necesario para posibilitar que se lleve a efecto sin impedimentos”.[29]
            El lunes 30 la Mesa Sindical Coordinadora de Entes eleva documento al director de la Oficina Planeamiento y Presupuesto, firmado por la Federación Ferroviaria, aute, ancap, ose, aebu, suanp, Organización de Trabajadores Aeronáuticos, sobre la  situación salarial, el anteproyecto de Reglamentación Sindical, los despidos, pases a disponibilidad, traslados, sumarios y sanciones económicas, detención y requerimiento de dirigentes y militantes.
            Al otro día y cuando se realizaban intensas discusiones sobre la posibilidad de acompañar una propuesta de paro general que impulsaba la cnt para el próximo 2 de agosto, en un allanamiento del local sindical de la Unión Ferroviaria se produce la detención de casi la totalidad de sus dirigentes, los que son conducidos al cuartel de Ingenieros Nº 5 de Peñarol y posteriormente a la Escuela de Armas y servicios ( kilómetro 14 de camino Maldonado).[30]
            El paro del 2 de agosto, finalmente se suspende por “falta de condiciones”[31].



[1] 15 días que estremecieron al Uruguay. Golpe de estado y Huelga General. 27 de junio – 11 de julio de 1973. Página 35.
[2] Los otros dos son el Banco Hipotecario del Uruguay y la Compañía del Gas.
[3]15 días que estremecieron al Uruguay. Golpe de estado y Huelga General. 27 de junio – 11 de julio de 1973. Pág. 188.

[4] BHU, Domingo Mantero, Banco Mercantil, Ramponi y Gosta.
[5] Víctor Facal, Murara, Bello Hnos., Felitti y Camejo, José Ma. Ave, José Gil Justes, Laborde Hnos., Alberto Brignoni, Fibratex.
[6]15 días que estremecieron al Uruguay. Golpe de estado y Huelga General. 27 de junio – 11 de julio de 1973. Pág. 378.
[7] Ibid. Pág. 487.
[8] Ibid. Pág. 524.

[9]  Dos comunicados del régimen se dedican a atacar a la dirección gremial de los ferroviarios, “15 días que estremecieron al Uruguay. Golpe de estado y Huelga General. 27 de junio – 11 de julio de 1973. ver página 252 bajo el título de “Falsos dirigentes ferroviarios”.
[10] Comunicado referido al día 9 de julio de 1973.
 
[11]15 días que estremecieron al Uruguay. Golpe de estado y Huelga General. 27 de junio – 11 de julio de 1973,  página 173 .
[12] El dictador Bordaberry informaba el 30 de junio a la prensa sobre la «normalidad laboral»: diciendo que habían sido desocupados los talleres de AFE en Peñarol y los trabajadores se reintegraban paulatinamente a sus tareas. ibid, página 257.
[13]15 días que estremecieron al Uruguay. Golpe de estado y Huelga General. 27 de junio – 11 de julio de 1973,  ,  pág 269.
[14] Ibid, página 275.
[15] Ibid, página 284.
[16] Ibid, página 359.
[17] Ibid, página 412.
[18] Ibid, página 485, que algunos testimonios, mencionan la integración de una comisión coordinadora entre la CNT y el Frente Amplio integrada por los dirigentes sindicales frenteamplistas Thelman Borges (COT), Víctor Semproni y Santiago Minetti (AEBU) y Ramón Martínez (Ferroviario).
[19] Ibid, página 286.

[20] Esa política había tenido éxito, como lo documenta el libro de Rico, en los medios de transporte en Montevideo.

[21]  Centro Social Peñarol ubicado en la esquina de Avenida Sayago y Camino Edisón.

[22]15 días que estremecieron al Uruguay. Golpe de estado y Huelga General. 27 de junio – 11 de julio de 1973, página 417.
[23] Ibid, página 468.
[24] Ibid página 474 y 489.
[25] Ibid, página 612.
[26] Ibid, página 606.
[27] Ibid, página 515.

[28] En la fundamentación que se establece que “la abrumadora mayoría de los sindicatos ya habían rechazado”esos porcentajes formulados por el gobierno antes del 27 de junio. Que el deterioro del salario real en 1972 había sido cercano al 20% con relación al año anterior. Que el porcentaje decretado era inferior al alza del costo de vida en lo que iba del año 1973 (36%) y que para el segundo semestre se estimaba en un 10%. O sea que mientras al costo de vida aumentaría entre un 50 a 52% los salarios lo harían entre un 25 y un 30%.
[29]  Documento de archivo del autor. Está fechado julio de 1973 y en donde se establece el día y la hora de la reunión en la Federación Autónoma de la Carne, figura con puntos suspensivos.

[30]15 días que estremecieron al Uruguay. Golpe de estado y Huelga General. 27 de junio – 11 de julio de 1973,  páginas 55 y 556 . Se publica una lista parcial que se encuentran presos el 10 de julio (o que caerán en los próximos días) en el cilindro. Allí se nombran a Pedro Toledo, Ramón Martínez, Francisco Maiorana, Gilberto Coghlan, Héctor Althesor, Raúl Olivera, Félix Vidarte, Walter Caulia, Ulises Villanueva, Balles Acevedo (Ferroviarios); Ángel Álvarez, Felix Vidarte. Creo que ninguno estaba preso en esa fecha, salvo Luis Alberto Raymundo y los que fueron detenidos el 31 de julio, no fueron recluidos en el Cilindro.
[31] Ibid, página 637.